Presidente del Comité Dominicano de Derechos Humanos denuncia que existe una doble vara cuando toca sentenciar a un compatriota en la Isla
El caso de Aníbal Reyes Rojas, un obrero dominicano que cumplió 11 de los 85 años a los que fue condenado a prisión por un crimen que afirma no cometió, es solo la punta del iceberg de las inconsistencias del sistema judicial que mantiene a personas inocentes cumpliendo penas por delitos de los que no son responsables, mientras los culpables están en libertad.
Así lo expresó el presidente del Comité Dominicano de Derechos Humanos, José Rodríguez, quien indicó que en los tribunales locales hay más de cinco casos que se dilucidan actualmente por violaciones a los derechos humanos. Esto sin contar los más de 30 convictos dominicanos que alegan estar encarcelados siendo inocentes, dijo.
“El sistema de justicia en Puerto Rico es racista y xenofóbico con los compatriotas (dominicanos). Hay jueces, fiscales y policías muy serios, pero también hay fiscales activos ahora mismo en San Juan que se dedican a cuadrar casos contra dominicanos”, dijo Rodríguez a EL VOCERO.
Explicó que conocía el caso de Reyes Rojas, natural de Nagua, capital de la provincia dominicana María Trinidad Sánchez. Afirmó que desde un inicio observó que existían muchas incongruencias que podían exculparlo.
Los hechos que se le imputaron a Reyes Rojas se remontan al 9 de septiembre de 2007, en Vega Baja, cuando dos individuos lo secuestraron a mano armada en un garaje donde acababa de echar gasolina.
Los policías que intervinieron en la persecución de su vehículo, tras producirse el secuestro en la gasolinera, presuntamente no hicieron el mínimo esfuerzo por arrestar a los dos delincuentes armados que habían cargado con un botín de $15 mil en efectivo.
Mientras los delincuentes escapaban, los agentes arrestaron al obrero dominicano como responsable del asalto a mano armada en un negocio en Vega Alta, pese a que este argumentó que era una víctima de los delincuentes, quienes incluso dejaron un pasamontaña en su vehículo, que en las pruebas científicas dio negativo a su ADN.
“Antes era uso y costumbre salir a buscar a un inmigrante sin estatus regularizado para acusarlo de crímenes que no había cometido. Por ejemplo, en San Juan hay un fiscal que cuando ve que el caso es de un dominicano, pues se ensaña contra los dominicanos”, abundó Rodríguez.
Explica la jefa de fiscalía
Por su parte, la jefa de fiscales del Departamento de Justicia, Olga Castellón, expresó que la excarcelación en el caso de Reyes Rojas no está enmarcada en una evaluación de las circunstancias del crimen que provocaron su condena.
“La determinación del foro primario que autoriza su excarcelación atiende un asunto estrictamente procesal en el caso que surge después que se emitiera el fallo de culpabilidad el 17 de junio de 2008. La circunstancia peculiar en este caso fue la dilación de tres años en la adjudicación definitiva de la sentencia dictada, viabiliza la aplicación de unos desarrollos jurisprudenciales en torno a los efectos de una desestimación del pliego acusatorio”, expresó a EL VOCERO.
El ministerio público, según dijo, se encuentra explorando las alternativas legales disponibles para lograr que en este caso prevalezca la justicia y el violento crimen por el que fue procesado y convicto no se quede impune.
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